Para ellos somos como niños. Y uno de los adultos, tal vez voluntariamente, se ha dejado la puerta entreabierta, y hemos podido atisbar en el interior. Y a los que estaban en el interior no les ha gustado. Nos repiten que no hemos visto nada. Pero al mismo tiempo quieren castigar a quien nos aviso de que la puerta estaba abierta. Ahora esperan que nos olvidemos de lo que hemos visto.
No comments:
Post a Comment